Fondos buitres... eso, ! BUITRES !






La situación de los fondos buitres, me recordó una historia que leí siendo chica.

En una comida donde estaba Salomón, alguien terminó su cena antes que el rey, una terrible falta de educación, entonces le pidió a su vecino un huevo duro para ir disimulando. El vecino, le puso como condición que debería devolvérselo en el momento que lo reclamara.

Pasaron los años y cuando ya se había olvidado el asunto, lo exigió, pero no el huevo, sino muchísimas gallinas y pollos, todos los que en transcurso de los años, podrían haberse generado de ese huevo.

Llegaron a la justicia y el juez falló a favor del demandante. El deudor, que no tenía como pagar semenjante extorsión, sabía que allí había una injusticia y no cómo demostrarlo. Por eso recurrió a Salomón, que luego de meditar un instante, le aconsejó que sembrara habas cocidas en los lados de los caminos del pueblo, donde todos lo vieran.

Los vecinos asombrados, creyéndole loco, le preguntaban que esperaba obtener de una siembra de habas hervidas.

Y él siguiendo el consejo de Salomón respondía:

- Habas

- Pero si están cocidas... No vas a cosechar nada.

- Sí las obtendré, Uds. están equivocados porque un juez en su sabiduría afirma que de un huevo duro, puede germinar un pollo.

Tanto fue el barullo que se armó, que el juez debió revisar el fallo. De resultados de lo cual, la condena fue la de devolver un huevo hervido.

Cosas de la codicia y del saber popular. Podríamos seguir años, contando fábulas y obras literarias de envergadura sobre el tema, y, ejemplos históricos de ambición e injusticia.

Para no aburrir: a mí los usureros me provocan un asco. Puajjj




17 de junio de 2014